domingo, 18 de abril de 2021

BENEFICIOS: ACADÉMICOS

Beneficios de la educación física a nivel académico:


Al producir efectos beneficiosos a nivel psicológico, es lógico pensar que estos efectos tengan una incidencia positiva sobre el rendimiento académico. Así es. En este sentido, investigadores de la Universidad de Virginia Occidental han probado casi con 1.200 alumnos de quinto curso, pudiendo observar que los alumnos que estaban en buenas condiciones físicas, obtenían mejor rendimiento en todas las áreas puestas a prueba (lectura, matemáticas, ciencias y estudios sociales), los alumnos que tuvieron peores calificaciones fueron justamente los que estaban con lesiones físicas o no practicaban ningún deporte.


  • Estar en forma ayuda a optimizar el azúcar en la sangre y los niveles hormonales de la función cerebral máxima.

  • Un niño que está en buena forma física logra mayor concentración a la hora de estudiar y posee un grado de motivación más elevado.

  • Los niños necesitan una nutrición adecuada y ejercicio físico regular para maximizar el rendimiento escolar y las calificaciones.

  • Los estudios realizados en adultos muestran que el ejercicio aumenta la función del cerebro, logrando mejor rendimiento en sus trabajos o tareas domésticas.

  • Aumento de la memoria

  • Aumento del rendimiento escolar

  • Aumento de la eficacia en el trabajo

  • Aumento del funcionamiento intelectual



BENEFICIOS: PSICOLÓGICOS

 

Beneficios de la educación física a nivel psicológico:


Son muchos los estudios que sugieren que existe una relación positiva entre la actividad física y el bienestar psicológico.


  • Hay que valorar la práctica de la actividad física como un medio para un equilibrio psicofísico, es decir, poner el acento en el desarrollo integral del niño, donde no hay opción a la separación entre cuerpo y mente, sino que hay que entenderlo como un todo.


  • Desde la educación física se contribuye a fomentar el aprender a aprender. Dentro de los juegos y actividades que se plantean el niño tiene autonomía para hacer y deshacer enfocado siempre a conseguir sus objetivos -no ser pillado, saltar la comba, etc.-. La consecución de estos objetivos genera autoconfianza y nos ayuda a afrontar la vida con mayor optimismo y energía, ya que como hemos dicho, aumenta nuestra autoestima y nos hace sentir bien.


  • La realización de actividad física ayuda a contribuir a evitar que aparezcan trastornos mentales como la depresión o la ansiedad.


  • Ayuda a superar la timidez o a frenar impulsos excesivos.


  • Aumenta la autopercepción de la imagen del cuerpo y la autoestima física.


  • Sirve como a de escape o distracción para la rutina diaria y estresante del día a día, lo que hace que aumente la sensación de bienestar.


  • Gracias a la actividad física, se generan endorfinas, las cuales ayudan a reducir el dolor y aumenta la euforia en nuestras vidas.


  • Otros beneficios mentales a la hora de realizar actividad física son: Aumento del rendimiento académico, de la confianza, de la memoria, de la percepción, del bienestar, de la eficacia en el trabajo, del autocontrol, del funcionamiento intelectual, etc.


BENEFÍCIOS: SOCIALES

Beneficios de la educación física a nivel social:


Al igual que a nivel físico, son muchos los beneficios a nivel social que tiene la práctica de la educación física, pero no vale hacer educación física por hacerla y de cualquier manera, sino que será la educación física de calidad la que transmita esos valores que se le predisponen positivos a la práctica de la actividad física.


  • Los niños deben tener tiempo libre para desarrollar su imaginación y su autonomía personal, y bajo este prisma la educación física le aporta una serie de recursos que favorecen la práctica de actividad física, para abogar por un estilo de vida saludable, como alternativa de ocupación del tiempo de ocio.


  • El desarrollo de las habilidades sociales, es otro pilar fundamental que se trabaja desde una educación física bien enfocada. Las actividades físicas y en especial las que se realizan colectivamente son un medio eficaz para facilitar la relación, la integración y el respeto, a la vez que contribuyen al desarrollo de la cooperación y la solidaridad.


  • Una educación física de calidad ayuda a aprender a convivir, fundamentalmente en lo que se refiere a la elaboración y aceptación de reglas para el funcionamiento colectivo, desde el respeto, a la autonomía personal, la participación y la valoración de la diversidades dotar a los niños de recursos de cooperación.


  • El cumplimiento de las normas que rigen los juegos, contribuye a la aceptación de códigos de conducta para la convivencia.


  • Las actividades físicas competitivas pueden generar conflictos en los que es necesaria la negociación, basada en el diálogo, como medio para su resolución.


  • La Educación física ayuda a la consecución de la autonomía e iniciativa personal en la medida en que aunque sea el maestro el que asigne la tarea o el juego a realizar, serán los propios alumnos los que deban desenvolverse, por sí solos, en las condiciones cambiantes que se van produciendo en las situaciones de juego. También lo hace, si se le da protagonismo al niño, en aspectos de organización individual y colectiva de diferentes actividades físicas o expresivas.


  • La educación física de calidad, y la práctica de una variabilidad de actividades, ayudan a comprender que cada cuerpo tiene unas características diferentes, lo que hace que se acepte la diversidad de una manera más natural, y tratar de evitar las comparaciones que no siempre son acertadas.


  • La transmisión, a través del juego, de diferentes tradiciones, contribuye también a conocer la riqueza cultural de su entorno.


  • Una educación física de calidad ayuda a romper estereotipos a nivel social referentes al sexo (como por ejemplo el baile).


  • Ayuda a canalizar y encauzar de forma positiva la energía de los niños.





BENEFICIOS: FÍSICOS

Beneficios a nivel físico:


Actualmente el sobrepeso y la obesidad está comenzando a ser un gran problema entre los más pequeños. La práctica de la educación física ayuda a controlar estos aspectos así como a prevenirla en edades adultas.


La forma de ganar peso en los niños y en los adultos es diferente Mientras que en los adultos se gana o se pierde peso cambiando el tamaño de las células adiposas (células que almacenan y forman los depósitos de grasas del cuerpo), en los niños se generan nueva células para almacenar la grasa cuando sea necesario. Por tanto, los adipositos, según investigaciones, se incrementan en la infancia en lugar de en la edad adulta. Lo que esto quiere decir, es que los niños que tengan sobrepeso encontrarán mayores dificultades para perder peso que aquellas personas que engorden ya siendo mayores.


Cuando se pierde peso, después de una dieta muy estricta, es habitual que se produzca el efecto rebote, que se ganen los kilos que se han perdido e, incluso, se puede llegar a engordar más. Esto podría deberse (instituto sueco Karolinska Institutet), a que a partir de los 20 años las células adiposas, o adipocitos, que son las que acumulan las grasas, no disminuyen de número, sino que cuando se adelgaza sólo disminuyen de tamaño. "Los resultados muestran, al menos en parte, por qué es tan difícil mantener el peso después de adelgazar", afirma Peter Arner uno de los miembros del equipo que ha realizado el estudio, "las células adiposas necesitan llenarse de lípidos rápidamente”. Este descubrimiento avanza en el conocimiento de cómo el cuerpo humano regula su peso ya que demuestra que el número de adipocitos se mantiene constante a lo largo de la vida adulta. Hasta ahora se creía al adelgazar se reducía su número. Sin embargo, "el número total de células adiposas en el cuerpo es estable, porque se fabrican nuevas unidades y se equilibra con las que se eliminan por la muerte natural de las mismas", (Peter Arner)


En estas edades los huesos están en continua formación y crecimiento, por lo que es importantísimo que éstos crezcan con una mineralización considerable. La práctica de la actividad física favorece una mayor mineralización de los huesos -huesos más fuertes- y por tanto, se disminuye el riesgo de padecer osteoporosis a una mayor edad. En las niñas, si cabe, este aspecto tiene aún más importancia, porque a partir de la menopausia se produce una pérdida acelerada de la masa ósea, sobre todo entre los 5 y 10 primeros años posteriores a la pérdida de la menstruación.


La práctica de la educación física también produce una maduración del sistema nervioso motor y un aumento de las destrezas motrices. El conocimiento, la práctica y la valoración de la actividad física es un elemento indispensable para preservar la salud. Esta área es clave para que niños y niñas adquieran hábitos saludables y de mejora y mantenimiento de la condición física que les acompañe durante la escolaridad y lo que es más importante, a lo largo de su vida.


Su práctica nos protege de los riesgos derivados del sedentarismo (según la Organización Mundial de la Salud -OMS- el sedentarismo aumenta las causas de mortalidad, duplica el riesgo de enfermedad cardiovascular, de diabetes de tipo II y de obesidad. Aumenta el riesgo de hipertensión arterial, problemas de peso, osteoporosis, depresión y ansiedad).


La educación física ayuda a conocer las limitaciones y posibilidades corporales, lo cual es básico en la formación de cualquier persona.


CALENTAMIENTO DE TOBILLOS